La momia de las desgracias.

 

'alt="La imagen muestra la tapa de un sarcófago que tiene la cara y el cuerpo de una sacerdotisa egipcia que murió  por los años 900 a.n.e. y a la que se le atribuyen montones de desgracias".



“La momia de Las desgracias”, es una pieza de indiscutible belleza y valor, que reproduce a una mujer con peluca y un gran collar, las manos cruzadas sobre el pecho, con las palmas hacia arriba, hecha en madera y yeso y pintada con vivos colores. 

Se cree que esa tapa perteneció al sarcófago, donde fue enterrada una sacerdotisa de Amón Re, antiguo dios egipcio del sol y el aire.

¿Por qué le llaman La Momia de las Desgracias?


A la también llamada "Momia de la Mala Suerte", se le atribuyen historias terribles, desde que entre 1860 y 1870, fuera comprada a unos ladrones de tumbas, en Tebas, Egipto, por el inglés Thomas Douglas Murray, que se encontraba de viaje en el lugar, junto a otros ingleses.

¿Cómo comenzó todo?

Todo comenzó desde antes de la partida, cuando uno de los viajeros se adentra en el desierto y no vuelve. 

Luego, en el viaje de regreso a Inglaterra, un hombre del grupo perdió un brazo por el disparo accidental de un sirviente. Ya en Londres, uno se arruinó y otro de los que había estado allí, quedó postrado a consecuencia de una grave enfermedad.

El objeto fue a parar, a la hermana de uno de los que había sufrido desgracia, pero comenzaron a ocurrir desdichas en la familia y la entregaron al Museo Británico de Londres.

Aunque ya no quedaban rastros del amuleto, que llevaba en la cabeza, con una inscripción que decía: “Despierta de tu postración y el rayo de tus ojos aniquilará a todos aquellos que quieran adueñarse de ti”, allí también comenzó a hacer de las suyas. 

Se dieron múltiples caídas entre los turistas y murieron el fotógrafo que la retrató y el periodista que escribió sobre los infortunios que producía.

También se cuenta, que en el Titanic, un famoso espiritista de la época, estuvo contando sobre esas maldiciones a los que estaban con él en el salón de fumadores, llegando a decir que la momia, iba en el barco porque su nuevo dueño, un millonario norteamericano, la llevaba a su país. 

El Titanic se hundió, el que contó esto no sobrevivió y la momia quedó flotando. 

Fue recogida por un barco de salvamento estadounidense, que lo entregó a otro barco, el Empress of Ireland, para llevarlo a Londres y este también se hundió.

Nuevamente, fue rescatada de las aguas y entregada al Káiser Guillermo, en Alemania, y poco después comenzó la Primera Guerra Mundial.

Desde hace mucho se encuentra en el Museo Británico, sin que se hayan reportado nuevos percances.


Deseo que les haya gustado conocer a "La Momia de las Desgracias", y que hayan cruzado los dedos al mirarla, por si acaso, nunca se sabe. 

Un saludo y nos vemos por aquí, con más curiosidades y misterios. Los espero.


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